Muchos tutores que tienen perros con problemas emocionales como pueden ser la inseguridad o el miedo, o conductuales como la reactividad y la agresividad, se tienen que enfrentar a un “infierno” a la hora de salir a la calle e incluso lo hacen con miedo “por si pasa algo”.
¿Sabes la historia que hay detrás del otro perro?
- Enfermedad o dolor mostrando conductas agresivas si se acerca otro perro
- Perro adoptado que no sabemos su pasado
- Malas experiencias porque haya sido atacado en otras ocasiones y ahora tiene miedo pudiendo desencadenar una conducta agresiva si no se respeta su espacio
- Socialización incorrecta
Puede haber otros motivos, pero como veis, no todo es “mala educación”. Puedes ir por la calle con tu perro teniendo la mejor educación del mundo, viene otro perro, le ataca y desde ese momento reacciona a otros perros. ¿De quién es la mala educación aquí?
Cuando un perro está en terapia trabajando con su tutor los problemas de conducta que tiene, puede llevar semanas, meses o años trabajando para haber conseguido un pequeño avance, y que un perro se acerque de golpe, no respete su espacio o se acerque a 2 metros ladrando, tira por tierra todo el trabajado realizado, y vuelta a empezar. No os podéis imaginar lo frustrante que es esto hasta que tienes que pasar por ello y empiezas a verlo todo con otros ojos.
Por favor, cuando salgáis con vuestro perro a pasear, si le lleváis suelto tenéis que tener una llamada “perfecta”, y en caso de ver un perro atado con/sin bozal, sujetad a vuestro perro. Podéis preguntar si pueden conocerse, si os dicen que sí le soltáis, pero os aseguro que más de una persona os agradecería este gesto, o al menos, que cuando os digan “ata a tu perro por favor” no contestéis "no hace nada", porque sí hace.
¿Has pasado por una situación similar?, ¿qué opinas?